Visitor Q - Takashi Miike (2001)

Un hombre adulto negocia tarifas con una prostituta joven, él la desea y ella se ríe de él. Acaban practicando el coito y ella le cobra más dinero de lo acordado porque ha eyaculado antes de la cuenta. La situación incomoda por lo explícito de la escena y, especialmente, porque el espectador no sabe seguro si la chica es una menor. Más tarde descubrirá horrorizado que es su hija.

Visitor Q - Takashi Miike (2001)

Visitor Q – Takashi Miike (2001)

La primera escena que hemos descrito es una perfecta declaración de intenciones. Takashi Miike no nos lo va a poner fácil, va a por nosotros. Busca escandalizar, incomodar y hacer reflexionar sobre nuestras filias ocultas, vergonzantes. Rodada en su máximo apogeo de popularidad, después de Audition y el mismo año que Ichi the killer con los mínimos recursos. Según diversas fuentes el presupuesto fue de unos 70.000$. Rodada en limitadas localizaciones, con pocos actores y en formato vídeo.

El film es una especie de remake de Teorema, de Pasolini (1968). Más bien toma el mismo punto de partida: una familia en estado de putrefacción recibe una visita de un ser divino que provoca un cambio radical. Si en la obra maestra de Pasolini el tema central es la familia burguesa, aquí, los Yamazaki son  una familia rota por la violencia y el sexo. El extraño les brinda una salida mediante la radicalización de su statu quo.

Visitor Q - Takashi Miike (2001)

Visitor Q – Takashi Miike (2001)

Podríamos hablar de un Miike más autor, más liberado. El formato y el bajo presupuesto le permiten liberarse, aquí encontramos muchas de sus inquietudes temáticas presentadas de forma radical. Ya lo hemos comentado en alguna ocasión, Miike siempre deja su sello, aunque se trate de una película comercial pero en esta ocasión nos atrevemos a decir que Visitor Q es una de sus producciones más personales.

Durante sus noventa minutos asistimos a una escalada, a un catalogo de horrores que funciona como espejo deformante de la sociedad japonesa contemporánea. Sutilmente habla del papel de la televisión, pero queda eclipsado ante los abusos de los compañeros de clase del hijo, el ya citado incesto, los abusos físicos del hijo hacia la madre y la adicción a la heroina de la misma, que se paga trabajando de domina.

 

Visitor Q - Takashi Miike (2001)

Visitor Q – Takashi Miike (2001)

Queremos resaltar el trabajo y la entrega de los dos actores que interpretan al matrimonio protagonista, no solo por la generosidad que hace falta para lanzarse de cabeza a un papel tan arriesgado, las situaciones dramáticas están perfectamente interpretadas. Kenichi Endô hace del marido, un fracasado que abusa de su propia hija. Es un actor muy conocido y habitual del cine de Miike. Por otro lado está la mujer, Shungicu Uchida, una famosa mangaka y escritora que también actúa y canta que tiene una biografía que no desmerece a su papel y, como curiosidad, buscando información de la actriz hemos leído que tiene cuatro hijos: Alpha, Beta, Gamma, Delta. Alucinante.

Os recomendamos este film encarecidamente, especialmente a todos aquellos que tienen el estómago fuerte y la mente abierta. Una obra maestra del cine bizarro.